Tras dejar atrás un año 2020 que será recordado por ser uno de los peores años para la industria de la aviación debido a la pandemia del coronavirus, 2021 no parece por el momento presentar signo alguno de recuperación. De hecho, los datos se han encargado de echar por tierra cualquier esperanza de las aerolíneas a las primeras de cambio. Según ha revelado la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), las reservas para futuros viajes realizadas en enero de 2021 se redujeron un 70% respecto al año anterior.
Unos números que van a obligar a replantearse las previsiones iniciales que se manejaban para este año, en las que se preveía una mejora del 50,4% sobre la demanda de 2020, lo que situaría a la industria al 50,6% de niveles de 2019. Con el escenario actual, IATA señala que la mejoría respecto al pasado año sería de tan solo el 13%.
“El mundo está más cerrado hoy de lo que ha estado en los últimos 12 meses, y los pasajeros se enfrentan a un desconcertante mosaico de restricciones de viaje que cambian con rapidez y descoordinadas a nivel mundial”, lamenta Alexandre de Juniac, director general y CEO de IATA. “El optimismo de que la llegada y la distribución de las vacunas conducirían a una reanudación rápida y ordenada de los viajes aéreos en todo el mundo se ha desvanecido ante los nuevos brotes y las nuevas mutaciones del virus”, añade.
Pasaporte sanitario
En este sentido, desde IATA se insta a los gobiernos a que cooperen “con la industria en el desarrollo de estándares de vacunación, pruebas y autentificación que brinden la confianza que necesitan para reabrir las fronteras y reanudar los viajes aéreos”. Sin ir más lejos, la aplicación Travel Pass desarrollada por esta organización de aerolíneas y que, aseguran, “facilitará este proceso proporcionando a los pasajeros una forma de gestionar de forma sencilla y segura su viaje”