Aena ha puesto en marcha el ‘Plan de Actuaciones Invernales frente a contingencias de hielo y nieve’, más conocido como Plan Invierno, en los 20 aeropuertos de la red que durante los próximos meses tienen riesgo de sufrir condiciones climatológicas adversas.
En dicho Plan, Aena establece los procedimientos que deben seguir los aeropuertos ante este tipo de contingencias con el objetivo de que el hielo y la nieve no afecten a las operaciones programadas o se minimice la influencia que las mismas puedan tener en el tráfico aéreo de los aeropuertos.
Para una adecuada aplicación del Plan de Invierno, los procedimientos que contempla se actualizan regularmente, la maquinaria y medios técnicos se revisan periódicamente y el personal implicado recibe una formación continuada que se intensifica en la temporada anterior a la llegada de la temporada invernal. En este plan operacional participa tanto personal de Aena como de otros agentes implicados, entre los que están las compañías aéreas y los agentes handling de asistencia en tierra.
Los aeropuertos incluidos en el Plan Invierno son: Albacete, Asturias, Barcelona-El Prat, Bilbao, Burgos, Girona-Costa Brava, Federico García Lorca Granada-Jaén, Huesca-Pirineos, León, Logroño-Agoncillo, Adolfo Suárez Madrid-Barajas, Madrid-Cuatro Vientos, Palma de Mallorca, Pamplona, Salamanca, San Sebastián, Santiago, Valladolid, Vitoria y Zaragoza.
En cuanto al resto de instalaciones de la red de Aena, en ellas se mantiene un nivel de respuesta ante este tipo de inclemencias meteorológicas que varía en función de sus necesidades operativas y de su ubicación geográfica.
Durante la temporada de invierno los trabajos preventivos se centran en el seguimiento exhaustivo de las condiciones meteorológicas; el chequeo continuado del estado del pavimento en pistas, calles de rodaje y plataforma; asegurar la disponibilidad de equipos y material fundente y realizar mediciones periódicas del coeficiente de rozamiento.
Además, en los aeropuertos que son base militar o aeródromo de utilización conjunta (Albacete, León, Salamanca, Valladolid y Zaragoza), las actuaciones preventivas previas y las tareas de limpieza del campo de vuelo en caso de hielo y nieve se coordinan con la autoridad militar.
Para la presente campaña del Plan de Actuaciones Invernales 2018-2019 Aena cuenta con un presupuesto total que ronda los 2,3 millones de euros.
Equipamiento y formación de personal
Los aeropuertos de la red de Aena cuentan con medios propios y medios contratados a empresas externas para la retirada de la nieve y el hielo.
Para esta campaña Aena dispone de más de 100 vehículos propios destinados a la retirada de nieve y hielo, así como otros vehículos implementados con cuchillas y esparcidores de urea. Entre ellos destacan, por ejemplo, 22 vehículos medidores de coeficiente de rozamiento, 23 camiones con cuchilla quitanieves con esparcidor de fundente, 4 camiones esparcidores de fundente líquido y 17 barredoras (con cuchilla quitanieves o sopladoras), así como camiones contra incendios, tractores y vehículos 4×4 equipados con cuchillas quitanieves.
A estos medios se suman los del expediente para la ejecución del Plan de Actuaciones Invernales en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, que recoge, entre otros, 9 camiones equipados con cuchilla y cepillo barredor y soplador, 4 esparcidores de fundente líquido, 10 camiones equipados con cuchilla y esparcidor de fundente, 2 fresadoras, 9 palas cargadoras, 20 mini-excavadoras, 8 camiones con caja, 2 vehículos todo terreno con cuchilla y 3 vehículos destinados a inspección y control.
Además, las instalaciones de Aena disponen de una capacidad de almacenamiento de fundentes propios de más de 450 toneladas.
En cuanto a la formación de personal, desde 2003 se viene impartiendo formación relacionada con el Plan de Invierno a todos los colectivos implicados en este tipo de contingencias con el objetivo de lograr una correcta ejecución. Así, desde 2003 hasta hoy se ha preparado a más de 6.700 personas, sumando cerca de 95.500 horas de formación. En concreto, en el último año han recibido formación específica 415 trabajadores con más de 2.800 horas de formación.
Las acciones formativas van destinadas principalmente al personal de los Servicios de Extinción de Incendios de los aeropuertos en lo referente a su participación en el procedimiento de retirada de nieve y hielo (por ejemplo, manejo y utilización de vehículos quitanieves y esparcidor de fundente), así como al personal que participa en las actividades relativas a la utilización de los equipos medidores del coeficiente de rozamiento en pistas (empleo del vehículo, mantenimiento y calibración).
Protocolo de actuación
El servicio de meteorología del Aeropuerto, con las predicciones realizadas por la Agencia Estatal de Meteorología, comunica las posibles condiciones adversas, y la oficina de operaciones alerta a todos los equipos implicados.
Si las pistas y la plataforma están húmedas y aún no se ha producido acumulación de nieve o formación de hielo, se procede al esparcido fundente sólido o líquido o bien una combinación de ambos como tratamiento preventivo. En el caso de que haya presencia de hielo o nieve, el fundente se emplea como descongelante para eliminarlo y se procede después a limpiar con medios mecánicos (cuchillas quitanieves o barredoras) los restos de nieve o hielo que hayan quedado en las zonas afectadas.
Si las pistas y plataforma están cubiertas de nieve se limpian con vehículos que disponen de cuchillas quitanieves y esparcidores de fundente sólido o bien fundente líquido. También se utilizan vehículos barredoras de pista y ocasionalmente los camiones del servicio de extinción de incendios fuera de línea o en reserva en los que se instala una cuchilla quitanieves específica para su uso en aeropuertos.
A continuación, los vehículos medidores de fricción comprueban el coeficiente de rozamiento de las pistas para verificar que es el adecuado. Si el resultado es positivo, se comunica a todos los implicados que el aeropuerto vuelve a estar operativo.
Los fundentes, tanto de tipo sólido como líquido, que se utilizan en las pistas y la plataforma son de tipo no corrosivo con el fin de no producir daños en las aeronaves e infraestructuras.
En las aceras y zonas de paso de los usuarios, si es necesario, se aplica urea o bien otro tipo de fundente similar.
Puede ocurrir que las aeronaves necesiten acudir al servicio de deshielo que o bien lo tienen las propias compañías o lo tienen contratado con un agente de asistencia en tierra.